Epidemióloga de la Gerencia Regional de Salud indicó que la primera dosis solo protege un 33% ante la nueva variante.
La amenaza de una tercera ola es inminente, pero más aún con la variante Delta, la cual ya ingresó a nuestro país y podría ser el detonante para producir esta nueva fase de contagios. Esta confirmación ya causa preocupación entre las autoridades de La Libertad, debido a que en un escenario con esas características, esta región tendría alrededor de 17.000 pacientes en situación crítica y con necesidad de una cama UCI.
Dicha información fue dada a la prensa por la jefa del Área de Epidemiología de la Gerencia Regional de Salud, Ana María Burga.
“La variante Delta es de altísima transmisión y puede ocasionar que haya escape inmunológico; es decir, en el caso de que las personas tengan anticuerpos, ya sea porque se enfermaron o se colocaron la vacuna, la variante puede evadir esa respuesta inmunológica e ingresar al organismo, lo cual afectaría seriamente”, mencionó.
En un contexto como ese, la especialista consideró que ahora más que nunca es importante poner atención en dos factores fundamentales y básicos.
“En primer lugar hablamos del autocuidado, poniendo en práctica las medidas de bioseguridad como es el lavado de manos, la doble mascarilla y el distanciamiento físico. Y lo más importante, la vacunación. En caso de adquirir la variante Delta, la primera dosis protegería la salud en un 33%, y con la segunda dosis más del 80%. Las dos dosis son importantes para alcanzar un mejor nivel de protección del organismo”, manifestó.(LA REPÚBLICA)