sábado, 17 de octubre de 2015

Elecciones 2016: comenzó la carrera

Por: Dionicio Mantilla León

Para el 10 de abril del 2016 está fijada la fecha del proceso electoral para elegir al Presidente, Vice Presidentes, Congresistas y Representantes al Parlamento Andino de nuestro país, gobernantes que serán juramentados e, instalados luego, el 27 y 28 de julio de ese mismo año y, en caso de que el candidato a la presidencia, no obtenga más del 50 % de los votos se procederá a la realización de una segunda vuelta el 12 de junio de ese mismo año.

Según la Ley de Elecciones Generales los candidatos serán elegidos internamente en sus partidos desde el 13 de octubre al 21 de diciembre debiendo proceder a inscribir las fórmulas presidenciales y congresales el 11 de enero del 2016. La renuncia de funcionarios o gobernantes que deseen postular a otro cargo político deberán renunciar, previamente, antes del 13 de octubre.

En esta oportunidad, las elecciones generales tienen que encuadrarse dentro de las reformas que se vienen debatiendo en el seno del Congreso de la República y que tienen que ver con determinados aportes alcanzados al Poder Legislativo por los tres estamentos del Poder Electoral como son: El Jurado Nacional de Elecciones (JNE), la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) y la RENIEC y que tienen que ver con importantes cambios en la vida política del país, cambios que lamentablemente vienen siendo objeto de resistencia de la mayoría de agrupaciones políticas con representación en el Congreso porque dichos cambios sencillamente no convienen a sus intereses.

De otro lado, las últimas encuestas presidenciales arrojan el siguiente resultado: Keiko Fujimori, Pedro Pablo Kushinsky, Alejandro Toledo, Alan García, Daniel Urresti y César Acuña, con la salvedad de que este último recién inicia su carrera electoral mientras que todos los demás tienen varios meses de campaña.

En el mapa electoral aparecen las agrupaciones políticas de izquierda distinguiéndose hasta dos bloques importantes: El Frente Amplio y Democracia Directa, ambos en vías de unirse para garantizar el triunfo. El Frente Amplio y, de acuerdo a la Ley realizó, hace poco, sus comicios internos resultando electa la lideresa y congresista cusqueña, Verónica Mendoza. El eje programático de la izquierda se basa en su rechazo al modelo económico neo liberal planteando un modelo económico nacional, productivo y solidario.

Según el mapa electoral las preferencias ciudadanas se inclinan por los representantes de las agrupaciones políticas de derecha, esto es, que enarbolan el mantenimiento del actual sistema económico neoliberal que propugna eliminar el rol empresarial y las responsabilidades sectoriales del Estado y dar preeminencia al empresariado privado, actitud que, a lo largo de estas últimas décadas, ha traído como consecuencia desempleo, injusticia laboral, inseguridad, desaceleración económica, corrupción, pobreza y extrema pobreza . Actitud que se ha convertido en masoquismo por la presencia, en el cuadro de preferencias electorales, de candidatos cuestionados y procesados judicialmente por presuntos actos de corrupción como ECOTEVA, narco indultos, entre muchos otros delitos. Aun así, y ante la ausencia de las agrupaciones políticas alternativas, la mayoría de candidatos a primer mandatario son de derecha por lo que el elector estaría buscando sólo el mal menor sin mirar a la izquierda.

En este escenario el Presidente de la República, Ollanta Humala, va culminando su mandato con una escasísima aprobación ciudadana junto a su esposa Nadine Heredia a quien se le acusa de haber interferido continuamente en su accionar gubernativo. Desaprobación ciudadana nacida de la decepción por haber incumplido su oferta de poner en marcha la Gran Transformación y dar paso a una Hoja de Ruta con la complacencia del gran empresariado, pero con la desilusión de un pueblo que quiere un gobierno diferente, pero que hoy observa aterrado como se venden o concesionan todas las empresas públicas neurálgicas a las compañías transnacionales y se privatizan las empresas de servicios educativos y de salud, construyendo así un país ajeno y no nuestro.

El 13 de este mes ha comenzado la carrera electoral y, nuevamente, se da paso a la gran responsabilidad del electorado peruano de elegir al estadista más idóneo que esté libre de cuestionamientos y nos dé garantía de acabar con el imperio de la delincuencia y la corrupción, que sea capaz de construir un país desarrollado con justicia social, y , consecuentemente, nos libre de los lastres de la pobreza y la extrema pobreza.