Esta vez no viene solo. En su espera lo acompaña Bravo, un perro que lo siguió desde Laredo, mientras el chasqui corría.
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Por segundo año consecutivo, el Chasqui Bravo cumplió con su objetivo de correr 187 kilómetros hasta Trujillo, con el objetivo de conseguir juguetes y panetones a los niños de su natal Huamachuco, donde fue el punto de inicio de su maratón.
Pero este año un amigo de cuatro patas se unió a la carrera. Se trata de Bravo, su mascota, un perro criollo que lo comenzó a seguir desde Laredo y ahora se han convertido en los mejores amigos. Ambos nos esperan en la Plaza de Armas de Trujillo con los donativos para la Navidad de los niños huamachuquinos.
“El correr es un esfuerzo que busca incentivar la solidaridad de todos para que puedan compartir con nuestros niños. Esta vez quiero apoyar a 5000 pequeños, espero que consiga esa meta”, refirió el chasqui.
También nos contó la historia de Bravo, su mascota que recibe los abrazos y las caricias de todos los transeúntes y niños que pasan cerca a la plaza de armas, frente a la Casa de la Identidad, donde se encuentran esperando la colaboración.
“No me di cuenta, pero mi amigo me contó que salió de los cañaverales y que corrió conmigo. Ahora se queda acá conmigo (en la plaza de armas) y bueno, se quedará conmigo para siempre”, refirió.
Chasqui Bravo se encuentra en la plaza de armas, frente a la Casa de la Identidad, desde las 8 de la mañana hasta las 9 de la noche y estará hasta el 23 de diciembre. Todos los que quieran colaborar con él, deben visitarlo.(LA INDUSTRIA)