La misión permite a los europeos volver a Marte, tras un primer éxito en el 2003.
Baikonur, Kazajistán.- La misión ruso-europea 'ExoMars 2016' inició hoy su largo viaje desde el cosmódromo de Baikonur, en Kazajistán, hacia el planeta Marte, para buscar posibles pruebas de actividad biológica en su superficie.
La misión, montada pese a las persistentes tensiones y las recíprocas sanciones adoptadas entre la Unión Europea y Rusia, permite a los europeos volver a Marte, tras un primer éxito en 2003, y a los rusos concretar su sueño de explorar un día el planeta rojo.
El cohete Protón, que despegó a las 9:31 de la mañana de las estepas de Kazajistán, transporta una sonda capaz de detectar gases a nivel de vestigios, llamada TGO (Trace Gaz Orbiter), que "será como una gran nariz en el espacio", ilustra el argentino Jorge Vago, responsable científico de este programa para la Agencia Espacial Europea (ESA).
El cohete lleva además un módulo de prueba de aterrizaje, bautizado como 'Schiaparelli', nombre del astrónomo italiano del siglo XIX Giovanni Schiaparelli, célebre por haber observado los llamados "canales" de Marte.(la industria)