LA DRÁSTICA MEDIDA ADOPTADA POR EL JNE DE EXCLUIR A CESAR ACUÑA Y JULIO GUZMÁN DE LA LID ELECTORAL TRAERÁ MUCHA COLA: UN NUEVO ESPECTRO DE LA UBICACIÓN DE LAS PREFERENCIAS ELECTORALES Y EL REACOMODO FUTURO DE ALGUNAS AGRUPACIONES POLÍTICAS.
Por: Dionicio Mantilla León
Y ocurrió lo que tenía que ocurrir. El J.N.E., de acuerdo a la normatividad que rige los presentes comicios, puso fuera de la contienda electoral a César Acuña y Julio Guzmán. Este acto, sin precedentes en la historia electoral de nuestro país, viene provocando diversas reacciones en la ciudadanía siendo causal de un nuevo futuro para las dos agrupaciones políticas hoy defenestradas y un nuevo esquema de preferencias electorales.
Sin embargo, la decisión asumida por el máximo ente electoral de nuestro país no hace más que ratificar el respeto que todos los peruanos tenemos, particularmente las agrupaciones políticas, de cumplir con respetar el estado de derecho vigente lo que significa encuadrar nuestras acciones dentro del marco de la ley y de un elemental principio de justicia y equidad, señales de una convivencia armónica y ordenada de la sociedad con el objetivo de vivir civilizadamente.
La discrepancia ante la drástica medida adoptada por el JNE nace, empero, porque no ha tocado, hasta ahora, a otras agrupaciones políticas que también han incurrido en similares faltas que el Ing. Acuña, como es el caso de miembros del partido Fuerza Popular como Vladimiro Huaroc a quien se le ha descubierto repartiendo víveres en la localidad de Satipo y , lo que es peor, obligando a humildes campesinas de Tarma a jurar que votarán por Keiko lo cual es muy censurable y causal no sólo de exclusión sino de apertura de proceso penal.
Días atrás, la misma Keiko avaló, acompañada de su grupo de campaña, la entrega de dinero a personas pobres a través de la agrupación “Factor K” creada para promover la candidatura de la hija de Alberto Fumjimori. También, Kenyi Fujimori, quien donara 20,000 soles a la policía en plena competencia electoral argumentando razones humanitarias y solidarias. A esto se agregan otras irregularidades para la inscripción de Alianza Popular (Apra, PPC) y el Partido de Peruanos por el Cambio. En verdad, si se desea dar muestras de imparcialidad el JNE debe disponer sendos procesos de investigación de estos hechos.
Las consecuencias
Ahora bien, la exclusión de los dos candidatos por el JNE traerá mucha cola, una de ellas sería el alza en las preferencias electorales de agrupaciones política que se encontraban rezagadas al recibir el aporte de los votos que en el aire dejan los candidatos defenestrados, pero también algo que se veía venir como es el aumento de los votos nulos y blancos de electores decepcionados, y , lo que es peor, la desaparición de varios partidos políticos “pitufos” que carecen de opción y no pasarán la valla electoral.
Otra consecuencia que se ve venir es la desaparición de la agrupación política “Todos por el por el Perú”, cuyo caudillo, Julio Guzmán, fuera “puesto” por los multimillonarios Drago Kisik y Gonzalo Aguirre, ligados a las grandes compañías transnacionales entre, ellas norteamericanas e israelíes. Una agrupación sacada al “guerrazo”, de manera improvisada, sin doctrina, sin estructura orgánica, sin comités ni bases establecidas formalmente, ni un plan de gobierno consistente, sin comités ni bases debidamente establecidas de manera que su inscripción improvisada no llamaba la atención porque todo su actuar ha sido eso, improvisación lo que da pie para pensar en el inminente riesgo que hubiere corrido el futuro de nuestro país de haber ganado esta opción. Una agrupación que, aparte de exhibir un rostro nuevo, prendió en el gusto popular, porque plagió los colores (morado), gestos, ademanes y estrategia publicitaria del partido político español socialista PODEMOS que lidera Pablo Iglesias, partido que, en su momento, denunció el plagio.
Asimismo, otra consecuencia, será la concentración de los esfuerzos de Acuña por lograr el mayor número de congresistas por APP a nivel nacional, y , en el supuesto que cuelgue los botines políticos definitivamente, fortalecer el posicionamiento de su hijo Ríchard como el nuevo caudillo de Alianza para el Progreso agrupación basada en un ideario populista, pragmático, cortoplacista, pero sin visión de país y sin mayor trascendencia ideológica.
De esta manera, a sólo un mes de las elecciones, nuestro pueblo se apresta a participar en él con un cuadro de candidaturas que figuran como primeros en las encuestas, en el que cuatro de ellas Keiko Fujimori, (Fuerza Popular) Pedro Pablo kuschisnsky, (PPK) Alfredo Barnechea (Acción Popular) y Alan García (Alianza Popular)) representan una nítida ideología derechista y una férrea posición defensora del actual sistema económico político neoliberal, y , solitariamente, una, Verónica Mendoza, (Frente Amplio), de izquierda, planteando un nuevo sistema económico productivo y nacionalista.