'Clientes' los llamaban a sus celulares que tenían en sus celdas para acordar la ejecución del homicidio
integrantes de la banda fueron puestos tras las rejas| A. Castro
Trujillo. La cárcel es un infierno, un lugar desde donde emergen las más diabólicas maldades por parte de algunos internos. Los cabecillas de la banda de sicarios y extorsionadores ‘Dragón Rojo’ eran los más ‘conspicuos’ representantes de este averno.
Desde sus respectivas celdas, con solo presionar la tecla de uno de los celulares que usaban sin inconveniente alguno, decidían a quién ya no le permitían seguir respirando o a quién le atormentaban la vida.
Las interceptaciones telefónicas que les practicó, por varios meses, el equipo Constelación de la Dirección Nacional Antidrogas (Dirandro) de Lima, lo cual permitió poner tras las rejas a 16 de sus cómplices el pasado 5 de noviembre, así lo demuestran.
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